El pasado primero de julio vandalizaron, destrozaron y robaron varias cosas que eran de suma utilidad para el funcionamiento de la cantina y para que los chiquilines pudieran entrenar.
Con gran esfuerzo de los padres, algunas donaciones que recibieron, lograron reparar y reponer algunas cosas para que el domingo funcionara la cantina.
Este martes volvieron a robarlos, rompiendo lo reparado del último robo, llevándose nuevamente microondas, freidora, jarra eléctrica, etc.
«Desanima y te deja con una bronca bárbara. El esfuerzo no solo de horas de trabajo, también económico, de los padres se lo llevaron en un ratito. Recibimos ayuda y donaciones para reponer cosas del último robo y se lo volvieron a llevar», dijo a La Gaceta el presidente del Club, Víctor Simoncelli.
«Es injusto que sucedan estas cosas. Porque uno está acá para darle al barrio un lugar para que los chiquilines puedan desarrollar una actividad deportiva y vaya a saber quienes hacen lo imposible para que no sea así. Es una batalla que parece nunca acabar», agregaba Simoncelli
Concurrió al lugar Policía Técnica, y la investigación seguirá con relevamiento de cámaras de seguridad del lugar.
