El caso de las torturas en el centro de reclusión clandestino “Los Vagones”, en los años 1975 y 1976 en la capital canaria, tuvo este mediodía una condena de 9 años para ex policía de esa época.
Dos de los acusados murieron en los últimos meses durante el juicio (uno se auto eliminó y otro por una enfermedad terminal), solamente queda vivo un ex policía que fue el condenado a 9 años de prisión, por el delito de tortura.
«El fallo todavía no está firme porque habrá una apelación de parte de la defensa», expresó el abogado de las víctimas, Pablo Chargoñia.
«Es un paso importantísimo en la lucha por la justicia, en la lucha contra la impunidad. Se demostró que en Canelones existieron centros clandestinos de detención y tortura», dijo la representante de la organización Ágora, María Julia De Izaguirre.


